El estiraje es necesario
para obtener un buen hilo ya que de lo contrario la uniformidad del hilo se
vera afectada y por lo tanto la calidad del mismo.
ESTIRAJE Y DOBLADO
El estiraje es una operación permite agrupar las fibras en forma paralela
y uniforme gradualmente hasta obtener un hilo continuo. Se lleva a cabo en cada
una de las etapas del proceso de hilatura, pero cobra mayor significación luego
del cardado y peinado donde se parte de una masa determinada de cinta de fibras
y se lleva a otra de mucha mayor longitud pero de sección proporcionalmente
menor.
La máquina que realiza el primer estiraje propiamente dicho es el
estirador.
A la salida de la peinadora las cintas son conducidas al manuar donde se
produce un proceso de doblado y estiraje para obtener una mayor regularidad de
la cinta. El manuar consta esencialmente de dos cilindros con
guarniciones que trabajan a distintas velocidades, lo que provoca el estiraje
de la cinta cuando lo atraviesa. Adicionalmente se logra una mayor
paralelización de las fibras, que contribuye a una perfecta uniformidad de masa
en toda su longitud.
Los equipos con moderna tecnología emplean un regulado electrónico
automatizado que corrige las pequeñas irregularidades que aún contiene el
conjunto de cintas acopladas. Esto se logra de la siguiente manera: a la
entrada de la cinta al manuar se registra continuamente los valores de espesor
de la cinta de fibras por medio de una palpación mecánica. Los valores que se
miden se convierten en señales eléctricas que son usadas para controlar el
estiraje en el campo de estiraje principal, regulando las oscilaciones del
material entrante. El resultado es una cinta con buena regularidad en longitudes
cortas y medianas, manteniendo además el titulo de la cinta en longitudes
largas.
En resumen, la función del manuar es paralelizar, doblar, mezclar y
entregar una cinta uniforme a la siguiente etapa del proceso, sin tramos
gruesos ni delgados, con peso y longitud controlados.
Con respecto a los avances de equipos de nueva tecnología, es interesante
señalar la existencia de un nuevo manuar de doble cabezal con regulación
automática que ofrece una velocidad de entrega máxima de hasta 1.000 m/min.
Esto fue posible lograrlo por los mejorados sistemas de estiraje y deposición
de cintas. Es factible trabajar con un bote grande de 1000 mm.
También hay equipos de un solo cabezal con regulación manual y diámetro de
600 mm (depósito en 2 botes) y diámetro de 1000 mm uno solo bote de recepción
de cinta (datos correspondientes a los manuares SB 20 y SB-D11 respectivamente,
ambos pertenecientes a la firma Rieter)
ESTIRAJE Y TORSIÓN
Este proceso que se lleva a cabo con las cintas proveniente de los
manuares, es realizado en maquinarias que reciben el nombre de mecheras.
En estas máquinas las cintas de manuar pasan por un tren de cilindros de
estiraje que permiten obtener una mecha de título varias veces más fino que el
original. Se produce un entrelazamiento de las fibras para darle la
cohesión al hilo resultante, se reduce significativamente el volumen del hilo y
perfecciona el paralelismo de las fibras, lo que aumenta su tenacidad y le
proporciona más suavidad en su superficie al dejar sueltas menos puntas de fibras.
Para lograr afinar la mecha se lleva a cabo un proceso de torsión que le otorga
la resistencia necesaria para soportar el devanado en la siguiente etapa del
proceso de hilatura. El material a la salida de la mechera recibe el nombre de
mecha de primera torsión, y es aquí donde por primera vez la masa de fibras
toma la forma de hilo. Estos hilos son dispuestos en una bobina que recibe el
nombre de bobina de mechas. La bobina de mecha es un producto intermedio
delicado. Por un lado, la capa exterior de mecha esta completamente sin
protección y, por lo tanto, tiene un alto riesgo de ser dañada. Por otro lado,
todos los defectos de la mecha son transferidos al hilado y a menudo también
son visibles en el producto final. Es por este motivo que los recientes desarrollos
en este tipo de maquinarias se centran en el transporte automático y por
desplazamiento aéreo para evitar precisamente que se originen los problemas
descritos.
Los aspectos más relevantes de los nuevos equipos son: cantidad de husos
desde 32 hasta 160 husos, encartamiento de 260 mm y una revolución máxima de
las aletas de 1.500 rpm, y el control de la cinta de alimentación se realiza
mediante una barrera de luz. Los elementos y datos de la máquina se pueden
programar mediante un computador, con velocidad programable durante la
formación de la bobina y cambio de mudada automático.